Evolución y Genética
2/4: Adaptación a diferentes entornos

A través de la evolución las especies cambian a lo largo del tiempo para adaptarse mejor a su entorno. La adaptación es un proceso clave a través del cual las especies transforman sus características físicas. Estas características se transmiten a las generaciones posteriores que se benefician también de una ventaja biológica.

La adaptación

Las especies de cactus han evolucionado desarrollando espinas en lugar de hojas para hacer frente a las elevadas temperaturas de los desiertos. De esta forma se reduce la superficie de la planta y disminuye así la cantidad de agua que se pierde en la evaporización. El cactus de lava se adapta tan bien al entorno que se ha convertido en una de las primeras especies en colonizar las rocas desnudas volcánicas de una isla de Galápagos con escasez de agua.

Lava cactus

El cactus de lava está muy bien adaptado a la lava seca, un entorno que supone todo un desafío (©Martin Whitaker)

La adaptación occure cuando:

  1. El entorno cambia o se introduce una especie en un nuevo entorno.
  2. Una especie es capaz de sobrevivir  durante el tiempo suficiente para adaptarse a un hábitat que haya cambiado.
  3. Se da una variación genética en una especie de forma que algunos individuos están mejor adaptados que otros a las nuevas condiciones medioambientales.

La herencia de características favorables

Los ejemplares de animales o plantas de una misma especie tienen distintos genes, por lo que existe una variación en sus características físicas. Los individuos con las características mejor adaptadas al nuevo entorno tienen más posibilidades de sobrevivir y reproducirse.

Los genes son transmitidos a los descendientes a través de la reproducción, de esta forma se pasan los genes que definen las características físicas que estén adaptados al nuevo entorno. Los individuos que estén menos adaptados a su entorno es posible que no puedan prosperar, por lo que es menos probable que sus genes se transmitan a la siguiente generación. Únicamente los genes codificados con las características físicas adaptadas al entorno se transmiten de generación en generación.

A lo largo de varias generaciones, la composición genética de una especie se modifica paulatinamente adaptando sus características físicas a las necesidades del entorno. Esta adaptación se traduce en la evolución.

Dado que la evolución ocurre muy lentamente es muy difícil poder ver el proceso.

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